El amplio despliegue de Protección Civil, Cruz Roja y Policía Municipal, hizo posible que los participantes disfrutaran de este acontecimiento con alegría y en plena naturaleza, acompañados por los toques de la banda de cornetas y tambores de la Cofradía de Nuestra Señora del Dolor, que este año ha participado por primera vez en este popular evento.

 Afortunadamente, no sólo no llovió, como algunos temían, sino que la temperatura en lo alto del cerro fue de lo más agradable, al extremo de considerarse estas condiciones atmosféricas las mejores de todas las romerías que hasta el momento se han celebrado.

            La misa de campaña fue oficiada, en un ambiente entrañable y familiar, por el padre José, pater de Capuchinos, quien contó con la colaboración en todo momento de los niños presentes, en gran número, que le ayudaron en cada una de las tareas de este emocionante acto religioso. Esto hizo que la celebración fuera considerada como una de las mejores que han tenido lugar hasta el momento. El ambiente que se creó entre el religioso y los niños admiró a todos los presentes, en ese clima de humanidad y sencillez que viene siendo característico de la romería cada año.

            El cielo que dejaba ver los rayos del sol entre las nubes, las espectaculares vistas que se contemplan desde lo alto y la emoción contenida de todos los presentes, hizo de esta romería un acontecimiento único, pues será recordada por los hellineros que tuvieron la fortuna de participar, aportando su esfuerzo para alcanzar la cima del cerro.

            Cada uno de los participantes recibió, como el año anterior, un ejemplar gratuito del libro ?El monumento de la Santísima Virgen María, reina del Universo, erigido en el Cerro del Pino, en la ciudad de Hellín, Albacete?. Esta obra, que ya cuenta con dos ediciones, es un regalo de su autor, un colaborador anónimo, a los ciudadanos de Hellín. A pesar de no ser hellinero, ni residir en esta ciudad, ha pagado íntegramente el importe de las dos ediciones,  así como de las dos placas conmemorativas que se pueden ver en el monolito.

            Los miembros de la Comisión Proyecto Virgen Reina se sintieron muy satisfechos con los resultados, que superaron todas las expectativas, debido a las inclemencias del tiempo en las últimas horas, aunque afortunadamente fue posible el pleno desarrollo de este evento con absoluta normalidad y gran afluencia de público.

Una vez terminada la misa tuvieron un especial recuerdo para un querido compañero de la comisión, desaparecido el año pasado, poco antes de la celebración del 50 Aniversario de la Virgen Reina: Amador Tomás, ?Piliso?. A partir de ahora seguirán trabajando en las mejoras del monolito y escultura de la Virgen Reina, así como del entorno, como vienen haciendo, ininterrumpidamente, desde hace diez años.